* Por Facundo Aché (fache@eldia.com)

Gimnasia anoche perdió un partido clave en Parque Patricios. Fue 2-0 contra Huracán, que jugó todo el complemento con 10 hombres por la expulsión de Fattori en el final del primer tiempo. Duro golpe para los de Leonardo Madelón, que quedaron otra vez en zona de descenso en un torneo que no tendrá respiro.

Huracán salió a buscar el partido y se encontró con un equipo tripero que le achicó los espacios hacia atrás, siempre detrás de la línea de la pelota y atento a la posibilidad de aprovechar la velocidad para avanzar en el campo y sacar alguna contra.

Eso no significa que se haya metido atrás. Al contrario, Gimnasia se hizo fuerte en la mitad de la cancha y supo reordenarse, más allá de que Saravia quedó enganchado y Yonathan Cabral lo salvó rechazando al córnea cuando se relamía Pussetto.

Más allá de un remate desviado de Carrizo, el Lobo mostró orden y se mostró sólido para no dejar grandes espacios. Aún así, el equipo de Martínez era más ambicioso.

Sin grandes sobresaltos en las áreas, el Globo se mostró mejor. Lucas Souto, a la salida de una pared, quedó solo contra Durso y el arquero alcanzó a taparle el tiro. Al Lobo no le resultaron los pelotazos largos y poco pudo asociarse para inquietar a Chaves.

Matías Cóccaro se filtró por detrás de los centrales y estuvo rápido Durso para ganar ese duelo más allá del choque con el uruguayo. De a poco Gimnasia comenzó a jugar peligrosamente cerca de su arco, con muchas dificultades hacerse amigo del balón. Cada vez más los de camiseta roja merodearon el área tripera.

Sin embargo, el Lobo tuvo una situación muy clara, con un buen desborde del uruguayo Abaldo para Benjamín Domínguez que no tuvo fuerza ni justeza para pegarle a esa pelota que pudo tapar Chaves y luego rechazar Souto.

Tuvo una Saravia, que remató débil. Y enseguida, cuando los hinchas locales comenzaban con el tradicional “movete Globo movete”, Chávez le regaló una pelota en la salida y otra vez Saravia quedó solo y su remate dio en el palo, pero el uruguayo estaba claramente adelantado.

Casi en tiempo de descuento, Federico Fattori cortó muy fuerte una contra de Matías Abaldo, que intentaba salir desde la puerta de su área. A instancias del VAR, luego de que Herrera le mostrase la amarilla, llegó la expulsión para el volante Quemero. Así, el Globo se quedó con 10 hombres para jugar un tiempo completo.

En el comienzo del segundo tiempo, el Tripero siguió igual en defensa y encontró mayores espacios para atacar a un rival que se quedó con los 4 del fondo y los dos volantes centrales para tratar de atacar con tres delanteros, con el ingreso de Mazzantti por Fértoli. Desde una pelota quieta trabajada, Cháves le tapó una pelota de gol a Ramírez. Un tanto sucia, pero chance al fin.

Sin embargo, cuando los hinchas locales más se impacientaban con el 0 a 0, de una pelota quieta llegó el gol de Huracán, cuando Fabio Pereyra tomó el rebote de una pelota a quemarropa que había tapado Durso.

Con el equipo en desventaja, Madelón incluyó dos variantes antes de los 20 minutos de juego: Lucas Castro en lugar del uruguayo Saravia y Franco Soldano por Eric Ramírez. La intención, ponerle más peso a Huracán en el área y tratar de aprovechar el hombre de más.

De una pelota parada a favor, Gimnasia quedó muy mal parado en defensa y Cóccaro se comió un gol increíble después de avanzar desde media cancha con la pelota. Insólito el error del uruguayo, que pareció llegar sin fuerzas.

Al Lobo le costó una enormidad general algo de juego. El DT tripero probó con más variantes, a partir del ingreso de Pablo De Blasis para jugar de 5 por Agustín Bolívar y Franco Torres por Matías Abaldo, en un cambio que sorprendió.

Si el negocio estaba en los espacios que podía dejar Huracán, ese plan desapareció con el 1 a 0. Con muchas dificultades para manejar la pelota, el juego largo fue una tentación que le hizo las cosas cada vez más simples al local.

Pablo De Blasis tuvo el empate para el Lobo, con un tiro libre que Chaves alcanzó a sacar volando hacia su palo izquierdo. Del rebote, Herrera cobró una carga de Soldano contra el arquero local cuando convertía el empate albiazul.

Madelón metió otro 9 más, con el ingreso de Rodrigo Castillo por Gallo. Aún así, Gimnasia casi no pudo meter centros al área de Huracán. En la última, una pelota al área mens sana y el remate de Mazzantti que puso el 2 a 0 para el Globo. Y así, desdibujado e impotente, noqueado por aquel gol de Pereyra, el Lobo se volvió de Parque Patricios con una derrota dolorosa.

Nota publicada originalmente en: https://www.eldia.com/nota/2023-9-20-3-47-16-no-aprovecho-su-momento-y-huracan-le-dio-flor-de-golpe-deportes