Con dos goles de Carrillo y otros dos de Piatti, Estudiantes estableció enormes diferencias (no sólo en el resultado) ante Newell's y lo goleó con justicia 4 a 1 en una actuación que llegó para ratificar todo lo que hizo en el clásico.
El Pincha fue muy superior en cada faceta del juego y ahora se anota como uno de los grandes protagonistas del campeonato. Con Guido en tan elevado nivel personal, el campeón reinante se anima a ir en busca de cualquier sueño. Motivado por la gran victoria en el clásico, Estudiantes salió a buscar la victoria en Rosario frente a Newell's ubicando en la ofensiva al binomio Carrillo-Luciano Giménez.
Ante una multitud en el Parque Independencia, el Pincha pretendió desde el inicio hacerse fuerte en la mitad de la cancha con la experiencia de Enzo Pérez y la energía habitual de Santiago Ascacibar.
La Lepra de Sebastián Méndez sorprendió a los cinco minutos de juego. Con sólo 18 años, Tomás Pérez, venció a Matías Mansilla al desviar un tiro libre de Gabriel Carabajal donde, sin dudas, el fondo de Estudiantes no tomó bien las marcas. En la primera llegada clara del Pincha, Piatti dejó una pelota muerta para Carrillo y el notable goleador, metido en el área, definió cruzado de zurda para establecer el 1 a 1. Gol con sello de categoría de su autor.
Newell's, a los 20 minutos, estuvo muy cerca de ponerse otra vez arriba en el marcador. Calderara desbordó a Gómez, lanzó el centro y el "Colo" Ramírez cabeceó fuerte y hacia abajo. La pelota se fue pegada a la base del palo izquierdo de Mansilla, que sólo atinó a observar.
Estudiantes soportaba la presión del local con la claridad de Ascacibar y la permanente peligrosidad de su mejor atacante, Guido Carrillo. En el minuto 33, Estudiantes volvió a facturar gracias al sano criterio de Luciano Giménez, recién llegado como refuerzo, quien, tras llegar al fondo de la cancha lanzó un centro bajo al corazón del área que conectó de derecha Pablo Piatti, ubicando la pelota entre Macagno y su palo izquierdo.
Jugando en un nivel interesante y con notable peligrosidad en el área rival, Estudiantes se fue al descanso ganando 2 a 1 en el Parque Independencia ante un Newell's que lo sorprendió con el primer gol, pero que luego fue superado claramente por el Pincha. Cuando recién se estaba desperezando el complemento, antes de cumplirse el segundo minuto de juego, Guido Carrillo gritó su segundo gol de la noche con un remate bajo de derecha y aprovechando una gruesa falla en el fondo leproso.
En el minuto 11, y luego de una jugada confusa donde pareció que la pelota permaneció en el campo gracias a un roce en uno de los pies del juez de línea número uno, Estudiantes amplió la impactante diferencia estableciendo el cuatro a uno gracias a un gran desborde Tiago Palacios con centro atrás y toque al gol de Piatti. Las protestas alteraron al local y ampliaron su impotencia, Estudiantes ya se había convertido en "amo y señor" de la despareja pulseada.
Carrillo estuvo cerca de anotar el quinto, pero su cabezazo final se fue al lado del palo izquierdo de Macagno, cuando el arquero ya había quedado fuera de la acción.
El partido empezó a hacerse extenso por la impotencia del local y los gritos nada amistosos de sus hinchas. En ese contexto, Luciano Giménez estuvo cerca de anotar cuando robo una pelota en tres cuartos de cancha, se acercó al área y sacó un remate que se fue cerca del travesaño.
Con muy buen criterio Domínguez hizo cambios a los 22 minutos. Bautista Kociubinski y Edwuin Cetré reemplazaron a Enzo Pérez y a Guido Carrillo, la gran figura de la noche. A los 29 minutos otra variante: Santiago Arzamendia debutó en el Pincha reemplazando a Pablo Piatti, uno de los mejores y autor de dos conquistas.
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