Miguel Ignomiriello cumplió este miércoles 98 años. Leyenda del fútbol platense y nacional. Un docente que sigue desparramando su amor por el deporte y principalmente por el fútbol al que sigue cada vez que hay una pelota rodando por el césped.

Se inició en el fútbol juvenil de Gimnasia, en el que formó las bases del famoso Lobo del 62. Un par de años después desembarcó en Estudiantes, club en el que fue un eslabón fundamental en la historia que siguió en adelante.

Fue el entrenador de lo que denominó La Tercera que Mata, campeona en 1965 con la mayoría de los jugadores que tres años más tarde serían campeones del mundo en Old Trafford: Juan Ramón Verón, Eduardo “Bocha” Flores, Alberto Poletti, Carlos Pachamé, Cacho Malbernat, Pelusa Bedogni, Bambi Flores, Juan Echecopar, Ramón Aguirre Suárez y Hugo Medina entre tantos otros más. Además fue la persona de consulta de Mariano Mangano para saber cuál entrenador era el indicado para dirigir la Primera y no dudó en señalar a Osvaldo Zubeldía. Por eso, la huella que dejó en el Pincha fue imborrable.

"Estoy muy bien, sorprendido por lo bien que me veo a los 98 años. ¿Vos sabés que yo no tomo ningún medicamento? Es una bendición de la vida y de los 70 años que estuve con mis jugadores al sol. El sol es vida", comentó sobre su presente, lúcido y saludable.

En diálogo con "El Equipo Deportivo", por La Redonda 100.3, comentó que sigue enganchado con el fútbol, al que le dedicó gran parte de su vida. "Veo fútbol permanentemente. El otro día me encantó el partido de España y Portugal. ¡Gran partido! En cuanto al fútbol argentino, creo que es un error sostener el campeonato que tenemos, con 30 equipos, mientras en todo el mundo los torneos tienen 20. Por eso el nivel no es el mismo. Veo mucho a la Selección también". 

La entrevista completa, en el audio adjunto: