
No hay manera de frenarlas
Llueva, haga frío, calor o caigan sapos de punta no es impedimento para que las chicas disfruten de la pasión en una cancha. Al momento del pitazo del árbitro, todo se olvida. Esto fue lo que sucedió el domingo, cuando ocho equipos de LIFIPA desafiaron el clima y salieron a jugar. El fútbol todo lo puede